Nº Visitantes

viernes, 24 de febrero de 2012

De Viaje IV: Panamá

Nosotros bien sabemos lo que es “Dios esta en todas partes pero atiende solo en Buenos Aires”; en Panamá parece ser un destino cruel: solo importa la Ciudad de Panamá, el resto que haga lo que pueda.

Cuando se llega a la capital no se entiende muy bien que se esta en Centroamérica: rascacielos de 70 pisos, cadenas de comida rápida norteamericanas por todos lados, hoteles, casinos y restaurantes cinco estrellas y casi no hay gente caminando las calles, hay zonas donde no llega el transporte público, todos autos importados como si los hubieran regalado.

Ante la sorpresa, pregunto y aprendo: el Canal de Panamá deja de ingresos limpios siete mil millones de dólares al año, la capital del país crece a ritmos e índices admirables pero, ¿Y el interior?

Las ciudades parecen detenidas en el tiempo, como si hubieran quedado tal cual eran en la Vieja Colombia (9 días después de la independencia de Panamá se aprobó por ley el desembarco y soberanía de los E.E.U.U en la zona del canal)

David y Santiago, las principales ciudades del interior, apenas si son caseríos asentados sobre la ruta Panamericana, sin industrias, comercios ni vida propia, cuasi dependientes de la asignación que les fija la capital.

Los pueblitos costeros sobreviven por lo que la naturaleza les dio: el Caribe limpio y claro hace que Bocas del Toro tenga aeropuerto y turismo propio; el pacifico templado y con olas atrae surfistas que se acercan a Farrallon, Santa Clara y Boca Brava.

¿Cómo se llamaba esa palabra de moda que solo encubre falsos progresismos? Ah si, distribución de la riqueza. Ojalá que aquí también llegue esa lluvia.


Otros de Panamá: Bocas del Toro

domingo, 19 de febrero de 2012

De Viaje III: Panamá con los ojos abiertos

Pueblos originarios de El Chiriquí y Fénix hace mas de 10 días han cortado la vía Panamericana (única ruta que une Panamá con Costa Rica) y juran que hasta que hasta que el Presidente no se haga presente, la protesta continuará.

El conflicto ya se cobro una vida y más de treinta heridos, además esta afectando a miles de turistas y hay muchos productos y alimentos varados en la autopista, próximos a descomposición.

¿El motivo? En tierras que pertenecen a los indígenas, se han aprobado dos proyectos a favor de mineras trasnacionales para generar hidroenergía y así acabar con las cuencas naturales y entrometerse en el hábitat de estos pobladores.

La Carta de la Organización de los Estados Americanos (OEA) reconoce como únicos soberanos y dueños de sus tierras a los pueblos originarios (lo que fue una reivindicación histórica) pero sucede que el dinero de las grandes corporaciones mueve montañas (también voluntades) por ello la aprobación a favor de los canadienses.

Para suerte de todos, la gente no esta molesta con los indígenas que cortan la ruta (ello siempre trae problemas) y le ha pasado la pelota al presidente, toda Panamá le exige que dialogue con los jefes comunales y se solucione la cuestión respetando la autodeterminación de los pueblos originarios.

Que lindos ejemplos nos esta dando el 2012, la resistencia en Famatina (Argentina) y ahora la insurrección de El Chiriquí. Los recursos naturales son de los pueblos, no de las empresas; y privilegiamos la vida y el agua antes de los míseros puestos de trabajo y las regalías con forma de limosna.

Link relacionado: En Argentina, Famatina

martes, 7 de febrero de 2012

De Viaje II: Bolivia

En Argentina “boliviano” no es un adjetivo que denota la nacionalidad de un ciudadano, es un insulto y de lo mas despectivo, que mal que habla de nosotros; es que siempre estamos mirando para afuera: los nodales europeos, aprender ingles porque se viene otro mundo y nuestras casas las vendemos por dólares que son unos papeles que se imprimen bien lejos de donde vivimos.

Cuanto tenemos que aprender de Bolivia, sus luchas y su Presidente, su nacionalismo eriza la piel, no son gente que quiere ser otra gente, simplemente lo son y a mucha honra. Aman su tierra y viven conforme a ella, no la revientan con el afán de ingresar divisas.

Evo Morales, primer presidente de origen indígena después de 500 años, se puso las botas y ya:
Nacionalizo los hidrocarburos y la exportación de gas a todo el continente (nosotros venimos de “privatizar nuestros recursos y ahora entregarlos en bandeja a las trasnacionales)
Expulsó a la DEA de su país, E.E.U.U pretendía que no se cultive la hoja de coca, practica milenaria y ancestral a cambio de una ayuda económica de 20 millones, en criollo, mandaba una limosna a cambio de extorsionar y decidir rumbos ajenos.
También les dijo en la cara al F.M.I y al Banco Mundial que él es el Presidente y él decide, no presten dinero para intrometerse en la autodeterminación de los pueblos.
Acá se entrega el bono “Juancito Pinto” a todos los niños para que compren utiles escolares desde el 2006 (3 años antes que nuestra asignación universal).

La lista podría seguir, y también se le podría reprochar que falten muchas cosas y es verdad, pero se va de a poco. Les falta todo pero les sobra dignidad.
Antes de viajar muchos me dijeron “Bolivia es pobre y feo”; es un gran error y la verdad es todo lo contrario: es hermosa y única en cuanto a sus bellezas naturales, y es excesivamente rica en cuanto a recursos, pero ha sido saqueada a lo largo de la historia: desde la plata en Potosí (la mayoría de este mineral del mundo salio de aquí) hasta la venta irrisoria de gas a Estados Unidos vía Chile.
Hoy cuenta con la mayor reserva de litio del mundo y un presidente que no lo va a regalar ni entregar a manos extranjeras.


Bocetos: Potosi
El Chapare

jueves, 26 de enero de 2012

De Viaje I : La Quiaca (Aquellos hombres buenos)

Que mejor manera de empezar un viaje que siendo recibido en casa de familia; dormir y comer con quienes recién conoces pero te tratan y respetan como al mejor pariente.

El enfermizo mundo de los negocios quiere enseñar y adoctrinar que el tiempo es oro, y que todo lo que hacemos es para obtener algún tipo de ventaja.
Se llega así a la mercantilización de la acción social. Muchos lo creen e intentan desprestigiar el altruismo, “detrás de toda acción hay un interés” dicen estos mercenarios.

Creo que viajar siempre es aprender, y como se te llena el corazón cuando te topas con gente que te ofrece su compañía, su sabiduría, su tiempo y te abre su casa y familia como a un hermano; nunca esperando nada a cambio; ser amable, generoso y solidario por el solo hecho de serlo, no midiendo ni viendo costos/beneficios.

Por favor revaloricemos la honradez y a la gente de bien que si los hay en Argentina, dejemos de enseñarles a los más chicos que una vida lujosa es el paraíso. Quitémosle el saludo a los corruptos y admiremos a los humildes que cada día se levantan con dignidad, valentía y simpatía para realizar trabajos que el mercado desprecia.

Así es la belleza de las cosas simples, quien mucho tiene mucho te puede dar, pero quien comparte lo suyo de corazón, sea poco o mucho, te hace estremecer.

Gracias familia Alfaro y Vergara, aprendí mucho de ustedes y ya son parte importante de este largo viaje.

jueves, 19 de enero de 2012

Famatina y la historia de siempre

Desde 1492 la historia latinoamericana es la misma: saqueo económico, devastación social y deterioro ambiental; todo orquestado por las grandes potencias y sus corporaciones, a su vez entregado por nuestros ineptos y corruptos representantes.

Desde Potosí y Ouro Preto hace 300 años, hasta nuestros días en los mega emprendimientos mineros de la Lumbrera (Catamarca), Veladero y Pascua Lama (San Juan).

Unos cuatrocientos valientes riojanos se han dado cuenta de que el agua y la vida son mucho más importantes que los abultados billetes verdes; han comprendido que ellos, pueblo soberano de Famatina, no quieren que vengan unos canadienses a hacer negocios y descomponer su hábitat natural.

Hoy acampando en la entrada al cerro y oponiéndose al proyecto minero son el orgullo de los que soñamos con una patria verdaderamente independiente (económicamente) y soberana (políticamente).

¿Alguien puede imaginarse una empresa argentina que explote y extraiga oro en Canadá, destruya el medio ambiente y que los políticos canadienses los reciban con las manos y piernas abiertas? Jamás ha sucedido, pero los que se creen dueños del mundo lo hacen en todo el globo a través de promesas de progreso y puestos de trabajo, aprovechándose de los países subdesarrollados, los bajos salarios y las migajas que exigen los gobernantes.

Para dar un ejemplo: Barrick Gold, la multinacional que tiene grandes manchas de sangre (caso Tanzania) esta instalada en San Juan, llegó con la mentira de las grandes inversiones y puestos de trabajo (3.000 millones de dólares y 1.000 puestos) y estima que en 20 años venderá onzas de oro por el valor de 60.000 millones de dólares. La regalía que se paga según la ley nacional 24.196 es del 3 % de lo extraído en boca de mina. Nadie sabe si el porcentaje es un chiste o si los legisladores votaron la ley que Peter Munk deseaba.

Ahora lo peor, dicha empresa utiliza por día 1.000.000.000 de litros de agua (leyó bien: mil millones de litros de agua por día) y para el proyecto binacional (Argentina y Chile) Pascua Lama va a utilizar la misma cantidad de explosivos que en la segunda guerra mundial. Parecería una fabula de Greenpeace o de película, pero esto sucede hoy en nuestro país.

Y hay que decirlo con todas las letras: nuestra Presidenta de la cual estoy conforme todavía no ha ido contra estos mercenarios internacionales que vienen a llevarse nuestros recursos. No es fácil, pero con el 55% de los votos y su imagen altamente positiva esta en condiciones de combatir a estas verdaderas corporaciones mundiales, tal como lo hizo Evo Morales con los dueños del gas en Bolivia, que hoy son un recurso estratégico del Estado vecino.

Tomemos el ejemplo del pueblo heroico de Esquel, que se dedica al eco-turismo y hecho a la minera que desforestaba sus bosques; apoyemos al pueblo insurrecto de Famatina y a su Intendente que esta con la gente a pesar de ser oficialista y que el proyecto minero venga de sus filas.



domingo, 8 de enero de 2012

Malos tiempos para la Cultura

Los sectores mas reaccionarios y conservadores de nuestro país están llevando a cabo una campaña de desprestigio en contra de la cultura en general y de nuestros artistas en particular; nos quieren hacer creer que ellos son mercenarios que se han vendido a una causa ajena o de la que descreen.

Ante el gran apoyo de los referentes de la música en actos del gobierno, se ataca y ensucia ese apoyo instalando en la opinión pública la idea de que ello es solamente por dinero. Es decir, impunemente se manchan los 45 años de carrera de Litto Nebbia aduciendo que ahora vive de algún subsidio del Estado, o pensar que Fito Páez necesita de ayuda y sueldo estatal, de allí su polémica nota sobre el viejo y cansador tema del “asco a la mitad de Buenos Aires”.
¿Acaso tenemos que mandar a la hoguera a nuestro Charly García por haber cantado el himno en la asunción de Cristina?

Que gran error y subestimación pensar y fomentar la neutralidad de nuestros artistas, ellos siempre han estado comprometidos con la problemática social de su época, y así lo reflejan sus obras.
La responsabilidad de los referentes de la cultura por su color político es a su exclusiva cuenta, la historia y los hechos se encargaran de juzgarlos.

A fin de cuentas, ¿Cuál es la diferencia de tocar en un escenario auspiciado por Pepsi, Claro o el Gobierno?

No dejemos que logren su cometido, el tema ya esta instalado: el rock nacional “se vendió” o “fue captado” por el kirchnerismo. Se desconoce la obra y trayectoria pero se critica por su apoyo político. No caigamos en ello, es una temeridad y burrada.

No creo que interese la bandera partidaria cuando todos disfrutamos de Luis Alberto Spinetta, Charly García o Juanjo Domínguez tocando en el Salón Blanco de la Casa Rosada allá por los años 2004/2005.



Link Relacionado: Nosereperiodista: Cultura o Pan y Circo

jueves, 22 de diciembre de 2011

Inflación Legislativa

En un año electoral, el Congreso de la Nación sesionó poco y nada, Diputados y Senadores se fueron a sus provincias de campaña y no concurrieron con frecuencia ni a sus comisiones ni a las Cámaras.

Cristina Fernández de Kirchner por su parte, en su discurso de asunción pidió al cuerpo legislativo que debata y apuré los tratamientos de la ley de tierras, ley anti-lavado de dinero, reforma al código tributario-penal, ley antiterrorismo y ley de papel de prensa.

Parece ser que nuestros representantes y los de las provincias, se tomaron a pecho lo de “ser soldados de Cristina”; así en una semana record la Cámara de Diputados le dio media sanción a ¡SIETE! Proyectos de ley en solo dos días.

A Priori es difícil opinar y conocer el contenido de dicho paquete de leyes, comparto y apoyo una ley de tierras que limite la venta a extranjeros y no termino de entender una ley como la de anti-terrorismo, con conceptos ambiguos y poco claros.

Donde no me deja de hacer ruido es a las formas y a los modos: no puede ser que el Congreso sesione luego de un pedido de la Presidenta ni que en tiempo insólito se aprueben leyes que el Ejecutivo envió. Necesitamos debate y consenso y no que se levante la mano porque el jefe de bloque lo solicita.

No pueden nunca nuestros Diputados y Senadores olvidarse que ellos representan a la ciudadanía y a los intereses provinciales respectivamente y no al partido político, el cual es el canal democrático por excelencia para ocupar los cargos.
Menos pueden ellos ser obsecuentes con lo pedido por la Presidenta, violando así la división de poderes y los controles que dichos órganos deben ejercerse recíprocamente según manda y ordena nuestra Constitución.

No es saludable esta práctica, el Congreso no es la escribanía del ejecutivo (aunque debo reconocer que en los últimos años he visto excelentes discusiones parlamentarias y se les ha abierto las puertas a sectores de la ciudadanía involucrados a través de las audiencias públicas). Es el órgano más representativo del Pueblo, cuna y base donde se decide el proyecto de país.

Que un legislador oficialista vote en contra de un proyecto de su bloque no es una traición ni causal de expulsión, ellos velan por los intereses generales y no los partidarios; el gesto de Daniel Filmus en la ley de glaciares del 2009 (re-impulsó en el Senado dicha ley que ya había sido vetada por la Presidenta) es la forma mas noble y digna de como esperamos obren nuestros mandatarios.

El Congreso es Soberano y no le debe obediencia debida a nadie mas que a sus electores, ojalá algún día lo entendamos del todo.

martes, 25 de octubre de 2011

Libro de Quejas

Tomamos de Zygmunt Bauman el concepto de sociedad liquida, que nunca llega a ser sólida por tender siempre a los simple, por no involucrarse. Nos rebelamos pero nunca nos revolucionamos, es más fácil reaccionar que accionar y por decantación rechazamos pero nunca proponemos nada.

En las redes sociales se desató una catarsis que nada tiene que ver con los resultados de las urnas: que votan los pobres, que están todos comprados por los planes, que la democracia no sirve para nada.

Sin involucrar a banderas políticas ni hacer propagandismo de ningún tipo, ni teniendo en cuenta la reelección de Cristina, propongo que reflexionemos cada uno en su interior sobre el lugar que ocupamos y que derecho tenemos a quejarnos una vez y ¡cada cuatro años! He aquí la guía para pensar antes de intentar cambiar el mundo/país desde la mesa del café:

¿Participamos en la vida de los partidos políticos?

¿Alguna vez fuimos a una marcha/movilización para reclamar un derecho?

¿Hicimos trabajo social o luchamos por una causa que considerábamos justa? ¿Cuánto tiempo?

¿Conocemos de cerca la problemática social que existe en los barrios marginales de los que tanto opinamos o solo los vimos por televisión?

Un modelo de país no se debate por twitter o facebook, se lo realiza y construye día a día con participación ciudadana, creo que estaríamos de acuerdo en que la democracia es una porquería si solo es votar cada dos años, hay que involucrarse, ser parte activa.

Basta de quejas si nunca hiciste/hicimos nada, por favor también olvidarse para siempre de la patética excusa: “Yo pagó mis impuestos”.


martes, 18 de octubre de 2011

El mito acerca de la “Cultura del Trabajo”

En toda mesa y discusión argentina sobre políticas sociales aparecen dos tópicos comunes: hay que fortalecer la educación como pilar del futuro y volver a la cultura del trabajo, esa que trajeron nuestros bisabuelos de los barcos.

A veces por un caso aislado que puedo haber sucedido o no, el opinólogo medio generaliza y afirma: “la gente ya no quiere trabajar, les conviene recibir ayuda del Estado y todos esos planes”. Es una falacia tan grande y repetida que todos caímos allí alguna vez.

El Centro de Investigaciones de la U.N.C realizó un estudio sobre trabajos ofrecidos en los diarios durante el año 2010 y así determinó que por cada puesto ofrecido hay veinticinco aspirantes a ocuparlos. ¿Dónde está entonces la tan en boga cultura anti trabajo? Me aventuro en concluir que quien no trabaja es porque no encuentra un empleo, simplemente existe mas demanda laboral que oferta de la misma. Esto sucede en todos los países.

Acaso ¿alguien conoce un cierre de fábricas porque los obreros decidieron no seguir en sus funciones? ¿O de verdad pensamos que una persona puede optar por recibir un dinero ínfimo antes que tener un empleo en blanco, bien remunerado, con obra social, seguro de desempleo y aportes jubilatorios?

No quiero meter en el medio las medidas asistencialistas o subsidios que el Gobierno entregó o entrega, solo derribar la paradoja de que las clases bajas no trabajan porque no quieren; es un mito tan anacrónico y reduccionista como el tristemente célebre “el pobre es pobre porque quiere”.

lunes, 5 de septiembre de 2011

Detrás de todo el Vil

Era la hora de la siesta, se hablaba de derecho ambiental y todos bostezaban, de repente la profesora comenta del importante honorario que logró gracias a un artículo y de repente todos escuchan atentamente, miró esas caras y pienso…

Lugar común: vaciamos de contenido a nuestra sociedad; nacemos, crecemos, nos educamos y estudiamos para ganar plata. Esta bien que de algo hay que vivir, pero ¿Por qué tiene que ser lo más importante?¿ Por qué toda acción u omisión la tenemos que cuantificar en dinero?

Somos mal aprendidos: Fernando Burlando es el éxito y un maestro rural el fracaso; así estratificamos y todos corren detrás de ello. El compromiso con el otro, hacer cualquier trabajo social o por el solo hecho de ayudar y hacer el bien, es para la gran mayoría un sueño de adolecentes o un hobby de millonario desocupado. Una voz fuerte querrá cortar esas alas: “” ¿y de qué pensás vivir?””

No quiero plantear utopías ni socialización de la producción, solamente darnos cuenta lo poco importante y cuan ansiado es una vida al servicio de obtener y acumular dinero por el solo hecho de hacerlo.

Creo que todos deberíamos formarnos e ir adquiriendo una vocación que tenga en cuenta una función social, aportar con un mínimo granito. Trabajar, ser honesto y pagar los impuestos no alcanza, ello no es una virtud sino una obligación.

El prestigio y el éxito no pueden ser otorgados por la marca de auto que manejamos, aunque para muchos es así. Revaloricemos las acciones altruistas, hagamos cosas sin esperar nada a cambio, comprendamos que colaborar y ayudar a quien lo necesita es mucho más satisfactorio que un jugoso honorario. Dejemos de hablar y pensar en dinero.