Nº Visitantes

lunes, 18 de abril de 2011

Tecnología y Sociedad II

Estaba en Riohacha, disfrutando de un pueblo vació y acogedor a la vez, sin ninguna atracción pero con mil encantos al mismo tiempo, en pleno goce mi amigo y compañero mendocino me dice: “¿Viste lo que es este lugar? Hay mucho mundo por conocer”, fue de esas frases que se te queda grabada en la memoria por su sencillez, grandeza y principalmente porque es una gran verdad. Hoy pienso que no conozco del todo la ciudad donde transitoriamente resido y veo que mis amigos tampoco.
¿No se nos habrá ido mucho tiempo en la computadora o televisor?

Confieso y sin ningún resquemor que he usado y todavía lo hago, a todas las redes sociales, pero un día me di cuenta que habían pasado siete días y no había llamado a mi abuela, pero ni por accidente pasaban 24 horas sin revisar mi facebook; que no me hizo falta preguntarle (y llamar) a aquel amigo de la infancia por su vida sentimental porque ya me había enterado e incluso visto fotografías.

En un asado escuche al voleo “es que hoy, no podes no tener, no te enteras de nada” ¿Quién nos metió en la cabeza toda esta gran farsa universalmente aceptada? ¿Acaso antes nadie vivía? ¿Acaso nosotros mismos no formamos parte de una generación sin celulares ni Chat y de igual modo supimos cosechar grandes amistades, estar siempre en los partidos del barrio y en las aventuras/travesuras grupales?

No pretendo hacerme pasar por un falso estoico de la anti-globalización, ni de la vida 2.0 (¿¿??) simplemente me vi dándole un excesivo uso a la tecnología y también lo observé en mis pares, creo que no tenemos que darle mas sentido que lo que realmente es: una maquina y una red social, o simple pagina de Internet.
Hay mucha ciudad, mucha gente y muchos encuentros humanos que nos estamos perdiendo por estar pendientes del monitor o caja boba.

Cerré algunas cuentas temporalmente para ver si me “desconectaría” de la vida y sus sucesos, para ver si era posible y capaz, (que tan mal estaba) creyendo volver pronto a la “normalidad” de seguir metido en toda esa parafernalia.

Aprendí algo y te recomiendo amigo lector que al menos lo intentes: deja una semana el celular, la computadora o la televisión, te darás cuanta que no son imprescindibles, que no hacen a la vida misma, y verás que nunca jamás podremos sobrevivir sin otras cosas realmente importantes: el cariño de quien queremos, la risotada con los amigos, los domingos en familia.

Hace cinco mil años el (¿ingenuo?) rey de Egipto Thamus, despreció el arte de escribir, adujo: Este invento producirá olvido. La sabiduría esta en la verdad, no en su apariencia. No se puede recordar con memoria ajena. Los hombres registrarán, pero no recordarán. Repetirán, pero no vivirán. Se enterarán de muchas cosas, pero no conocerán ninguna.

1 comentario:

  1. Muuuuyy cierto... Cada vez mejor estas cosas que subís ;) Congratz!

    ResponderEliminar