Nº Visitantes

domingo, 26 de junio de 2011

Paremos la Violencia

A razón de la sin-razón generalizada, me quedé prendido a la televisión, viendo lo que pasaba en las afueras de la cancha de River, es un lugar tan común pero pareciera que a nadie le importara, como si las victimas del fútbol fueran un mal necesario, un daño colateral justificativo de la pasión y todo lo que ella rodea.

Me siento tan estúpido, en todos estos años nunca había pensado en el detrás de toda esta basura; hoy un señor cualquiera se fue a trabajar y su hijo/familia se entera que esta internado en terapia intensiva con traumatismos graves. ¿Cómo ponernos en la piel de ellos? ¿Cómo le explicará una madre a su hijo cuando crezca que su padre fue asesinado por un tumulto cobardemente anónimo?

Las victimas del fútbol suman 257 (ver la lista acá) es decir, mas que la tragedia de Cromañón y que el atentado a la Amia, pero nunca hubo marchas masivas por dichas victimas y nunca nadie pagó el pato por ello. ¿Se imaginan el número de hijos, hermanos, padres, madres, etc. que hay detrás de todo estoque generó el Fútbol Argentino?

Antes nos vendieron el cuento de que las barras-bravas eran inadaptados sociales que concurrían a los estadios y los desmanes eran por su propia naturaleza anti-social. Hoy sabemos que la ecuación es simple, las barras fueron y son funcionales a los dirigentes, sindicalistas y políticos de nuestro país, ellos las crearon y les dieron poder e impunidad, pero ellos nunca respondieron por los actos de aquellos; como cielo que los cubre y alcanza a todos esta el vil dinero, siempre fue así.

Tampoco caigamos tan de lleno en la típica justificación “la sociedad esta enferma”; cuando algo es de muchos, no es de nadie, si la culpa se la echamos a todos, nadie será culpable. Yo mismo sufro y vivo intensamente los campeonatos de fútbol, pero no se me ocurriría partirle una piedra en la cabeza de un policía; en la cancha de River cuando terminó el partido había 45.000 personas que cantaban por su club y se entristecían por la situación, solo unos cuantos se encargaban de teñir de negro la historia.

La solución tiene que ser drástica, tienen que irse quienes manejan el fútbol hace años y nunca le encontraron solución a todo esto (¿se la buscaban?), tienen que enjuiciar a quienes causan lesiones y muertes, y sino que se pare el fútbol, para así reflexionar acerca de las victimas que ya se tragó este huracán y de cómo seguir adelante disfrutando de un espectáculo y no tener que soportar batallas absurdas e impunes.


Link interesante: http://www.salvemosalfutbol.org

No hay comentarios:

Publicar un comentario